Pero la experiencia, en muchas ocasiones, desmiente esta creencia. Es más, hay ocasiones en las que parece que la inteligencia y el poder tienen una relación inversamente proporcional. Cuando este caso es el del presidente del gobierno, malo para el país.
Es de comprender, que no de perdonar, que después de reuniones que duran toda la noche para decidir el futuro del mundo, esta panda de corderos adocenados con el dinero, cansados y con más ganas de volver a su casa que de otra cosa y consciente de su incapacidad para resolver los problemas, salgan a decirnos cuatro sandeces que no soportan dos minutos de sentido común.
Pero que lo haga un señor, candidato a presidente "del reino de España" después de días de meditación da miedo.
Entre las propuestas, muy sesudas, para reducir el déficit público y aumentar la productividad en España, los españoles debemos cobrar menos y trabajar más, y en esa línea el "ministro de Dios" propone "racionalizar" el calendario laboral para reducir los puentes, trasladando las fiestas al lunes más cercano, "con la excepción de aquellas fechas de mayor arraigo social".
Como es de suponer, las fiestas religiosas no se moverán "como Dios manda".
6 de Enero (día de Reyes), jueves y viernes Santo (Semana Santa),15 de Agosto( Asención de la virgen al cielo), 1 de Noviembre (Día de todos los Santos), 8 de Diciembre (Día de la Inmaculada) y 25 (Navidad).
Descartadas estas, sería muy raro celebrar el viernes santo el lunes, nos quedan las fiestas institucionales. Para el caso de Andalucía nos quedan el 28 de Febrero (Día de la Comunidad) y el 5 de Diciembre (Día de la Constitución). No creo que las comunidades acepten la celebración del día de la comunidad el lunes o viernes que toque, por lo del arraigo más que nada.
Por mismo motivo, el arraigo social, no será lógico cambiar la celebración de año nuevo a otro día diferente del 1 de Enero. Las campanadas el último domingo de diciembre o el primer domingo de enero sonaría raro.
El sentimiento de patria, tan arcaico en la derecha española no permitirá cambiar la festividad de la Hispanidad a otro día distinto del 12 de octubre.
Echando cuentas, solo queda el 1 de Mayo, Día Internacional de los trabajadores. Mira por donde, este si tiene todas las papeletas, pero más que por aumentar la productividad será para incordiar.
Saldremos de la crisis y aumentaremos la productividad en España pasando al lunes la fiesta del 1 de Mayo.
Si este es el nivel intelectual de nuestro presiden te y sus asesores, que el señor nos coja confesados.
Si pudiera hacerle una pregunta le diría, ¿Cuanto tiempo dedicó usted a meditar esta propuesta? Yo la vi enseguida, usted ni se paró a pensar.
